La utilidad de las Ventosas
El uso de las ventosas se remonta al año 300 o 400 A.C. También se han encontrado registros de su utilización en las culturas Egipcias y del Medio Oriente .La utilidad de las VentosasVntosas terapeúticas
Acupuntores y terapeutas de la Medicina Tradicional China son los capacitados en el uso de las ventosas, junto con la muxibustión y la aplicación de agujas (acupuntura).
Hay diversas formas de utilizar las ventosas, aplicadas en zona de dolor a tratar, sobre puntos de acupuntura o siguiendo el recorrido del meridiano (canales energéticos sobre los que trabajamos los terapeutas de MTC)
Lo que hacemos es desbloquear la zona afectada haciendo circular energía y sangre. “Pegamos” las ventosas al cuerpo, son como unos vasos de succión, se hace el vacío de aire y la ventosa succiona la piel. Esta succión trae sangre estancada a la superficie de la piel y mejora la circulación a través de los tejidos.
Están muy indicadas con muy buenos resultados en el tratamiento de dolor cervical, dolor lumbar, torceduras, tendinitis, ciáticas y como complemento en tratamientos de pérdida de peso.
Hoy os hablaré del uso de las ventosas en los tratamientos de acupuntura para bajar de peso y moldear el cuerpo: aplicándolas sobre las zonas de mayor acumulación de grasa, se van moviendo realizando un suave masaje en barriga, caderas, piernas.
Tiene la capacidad de mover estancamientos de grasa, retención de líquidos y mejora la circulación, ayudando a alisar la piel y reducir centímetros.Las sesiones duran entre 5-10 minutos por zona a tratar.
El inconveniente que puedes encontrar es que se romperán pequeños capilares y se puede producir algún morado, quedando la piel enrojecida, pero se va en pocos días y el beneficio es alto. Si tienes varices no se deben aplicar sobre ellas.
Las ventosas me acompañan siempre en mis sesiones, las uso para todo tipo de tratamientos, de dolor muscular y articular, para calentar el organismo frío y bajo de energía, para estimular el metabolismo y mejorar la circulación de energía y sangre… ¿Te animas a probar?